El municipio de Faro dio hoy un salto adelante hacia un futuro más verde, hecho de movilidad sostenida y de inclusión de nuevos medios de transporte en los hábitos diarios de la comunidad local. En efecto, durante la sesión pública de «Lanzamiento de la movilidad compartida en Faro», que se desarrolló en la terminal de autobuses «PróXimo», el Municipio presentó diversas medidas que determinan ese compromiso.

El primero fue la suscripción de la carta de principios de la movilidad compartida para ciudades humanas, un documento elaborado por un conjunto de ONG con el propósito de comprometer a los responsables de la toma de decisiones con el respeto del medio ambiente, la movilidad suave, la accesibilidad pública y la conectividad entre los subsistemas. Faro se convirtió así en la primera ciudad de la Península Ibérica a suscribir este acuerdo global, lo que fue efusivamente saludado en la comunicación hecha a distancia por la gurú mundial de la movilidad compartida y «madre espiritual» de esta carta, Robin Chase.

Se siguió la comunicación Infraestructura de Movilidad Ciclable de Faro, cuyas prioridades de inversión fueron presentadas por la Vereadora del sector, Sophie Matias. Con la presentación de la infraestructura, todavía eminentemente urbana, quedó garantizada que, ya este año, la ciudad recibirá considerables inversiones en esta red amiga de los modos suaves.

Pero para utilizar los subsistemas de transporte compartido y esta red de movilidad, es necesario que la comunidad esté acordada para la cuestión y motivada para imprimir esa dinámica. Fue precisamente a pensar en eso, entonces la Universidad de Algarve expresado su interés y voluntad de cooperar y el Municipio firmaron un protocolo de cooperación con la Federación Portuguesa de Ciclismo y bicicletas usuarios, organizaciones que representan a un gran universo potencial de usuarios de estos modos suaves.

Y como si fuera poco, el día quedó aún marcado por el inicio experimental de la primera operación con una plataforma de scooters eléctricos compartidos. Por ahora, serán 75 vehículos, a distribuir por 10 locales estratégicos dentro de la ciudad – los hotspots – donde los usuarios podrán levantar o dejar la trotina eléctrica. Por el momento, el sistema arranca con la plataforma «VOI», estando el Municipio en articulación con la «Flash», la TIER Mobility «y la» LIME «para entrar en funcionamiento en breve.

Con la adhesión esperada, la expectativa es que estas operaciones comiencen ya a dar una importante contribución a un futuro más libre de la emisión de gases de efecto invernadero y al desarrollo de una ciudad que se quiere, al final, más amiga de las personas que de los vehículos.

Para el alcalde, Rogério Bacalao, fue un día determinante para Faro, por ser «simbólico de una determinación que tenemos que ver nuestro sistema de movilidad evolucionar hacia la sostenibilidad, la eficacia, la accesibilidad y la seguridad, aprovechando las oportunidades que se derivan de las recientes evoluciones en términos de tecnología, negocio, demanda y gobernanza «.