El Castillo de Loulé

El Castillo de Loulé

El Castillo de Loulé se encuentra en la parroquia de San Clemente, población del condado de Loulé, Faro, Portugal.

Lo que queda del castillo y sus murallas denota la importancia que tuvo en el contexto islámico, ya sea por el tamaño de la cerca amurallada, o por la importancia artística y arqueológica de los materiales identificados.

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Un poco de historia

El castillo, de origen árabe, reconstruido en el siglo XIII, tenía un gran perímetro amurallado, parte de la cual es todavía visible.

Frente a la calle Barbacana destaca una torre albarrana, de albanaría, que data de la Baja Edad Media. Otra de las torres visibles se llama la Torre de Vela, también torre albarrana, que se encuentra en la antigua calle de la Corredoura, (actual Calle Ingeniero Duarte Pacheco), y cerca destaca la Puerta de Faro, que aún conserva restos de la primitiva construcción almohade. En los suburbios del sur, o barrio de la Morería, justo al lado de la Puerta de Faro, después de la reconquista, fue destinada una área a los moros forros que recibieron foral del rey Afonso III, en 1269. Fue en estas calles donde se situaban las instalaciones artesanales, a comprobar por los topónimos que aún existen.

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No hay rastros de la primitiva alcazaba, sin embargo, se supone que se encuentra en el mismo lugar donde hoy se encuentra la alcallería, que alberga diversos espacios culturales (Museo Municipal, cocina tradicional, Centro de Documentación con hemeroteca, fototeca, bibliografía y varios estudios sobre la historia local y regional, personalidades, eventos locales y otros).

Se mantienen por la ciudad las murallas almohades de barro, construidas, o al menos fortalecidas en el siglo XII, son visibles en pequeños tramos, camuflados por las casas que se fueron construyendo adosadas a la misma, y otras secciones de pared que se descubrirán en las intervenciones realizadas recientemente por el Municipio.

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Más historia

Loulé ha sido ocupada por pueblos desde la prehistoria, la ocupación romana también está documentada, pasando por el dominio árabe, cuya influencia se ve reflejada en la fortificación en la torre albarrana.

D. Afonso III, en 1249, auxiliado por caballeros de la Orden de Santiago, conquistó este castillo, que estuvo entregado a esta orden. En los siglos siguientes este fuerte se fue degradando.

En la época de los descubrimientos, con el crecimiento del comercio -esta región podía abastecer con vino, frutas y aceite-, fue recuperado por la mano del primer conde de Loulé, D. Henrique de Meneses.

Ya muy degradado, el castillo sufrió un rudo golpe con el terremoto de 1755, al que le siguió la ocupación de las áreas de las murallas, con casas para vivir. Clasificado como Monumento Nacional, lo que queda fue restaurado y actualmente funcionan en el interior del castillo, el museo arqueológico y la biblioteca municipal.

Loulé es hoy uno de los puntos neurálgicos del turismo algarvio. Sus bellezas (playas, gastronomía, monumentos, historia, y su eventos ya conocidos, etc.), hacen de Loulé uno de los sitios de obligatoria visita.

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